Creo que es interesante, al hilo de nuestro último post, comentar la única de las siete maravillas que se puede admirar en nuestro días: la esfinge de Gizeh.
Tallada en las rocas calcáreas de la meseta de Gizeh en una sola pieza, custodia las pirámides de Keops, Kefrén y Mikerinos. Según los griegos era un monstruo con cabeza y pechos de mujer, cuerpo de león y alas de ave que representaba la sabiduría. Esta criatura se agazapó en lo alto de una roca a la entrada de la ciudad griega de Tebas, y a todo aquel que intentaba entrar o salir le proponía un acertijo. Si no lo resolvía, lo devoraba. Pero un día apareció Edipo, que respondió correctamente y la esfinge se suicidó. Los egipcios desconocían esta historia, pero veneraban a personalidades con cuerpo de león y cara humana, generalmente de un rey, porque para ellos representaba la fuerza y el coraje y por este motivo seguían venerando a este ser misterioso.
Se piensa que fue construida por orden del faraón Kefrén de la IV dinastía (2520 - 2494 a.C.), cuyos restos es posible que se hallen en los subterráneos de la Esfinge, pero la cara es la de su hermano Djedefre, al que usurpó el trono.
Es asombroso que la única inscripción que aparece en ella es la denominada "estela del sueño", un muro de granito de 2´15 m en el que el faraón Tutmosis IV (1401-1391 a. C.) menciona que desenterró el monumento ya que, en un sueño, la esfinge le prometió el trono si la liberaba de las arenas del desierto. Para añadir más misterio a su origen se crean nuevas dudas con el descubrimiento de la "estela del Inventario" hallada junto a la Gran Pirámide, en la que se deduce que la Gran pirámide y la esfinge ya existían antes de Keops.
Lo evidente es que aunque haya llegado al siglo XXI La Esfinge ha sufrido bastante el deterioro de sus materiales primitivos. Un dato curioso, que no puede achacarse a la erosión externa de las crecidas del Nilo, vientos del desierto, o cambios de temperatura, son los cientos de fósiles que pueblan sus paredes, y más si lo añadimos a los estudios que dicen que su estado de erosión tendría que ser resultado directo de la inmersión acuática de sus muros al menos durante 600 años.
¿Cuándo, por su situación, podría haber estado inmersa bajo el agua? En la última glaciación, 15.000 años a.C, sería la última vez que las aguas habrían alcanzado la altura suficiente para cubrirla, junto a las edificaciones anexas. Esto contradice la versión oficial de su edificación, situando su origen mucho antes de la construcción de las pirámides. Y supondría una forma de vida, mucho más inteligente y desarrollada que la que los estudios actuales dicen acerca de aquella época. Cuesta trabajo pensar en realizar semejantes construcciones con los medios actuales, más aún con los que se conocen que podrían haber utilizado entonces.
¿Quién y cuándo hizo esta estatua de 14 de altura y 72 m de largo? Para los egiptólogos se trata de uno de los mayores misterios que guarda Egipto actualmente.