El honor de J. J. Benítez

Hace algún tiempo, Luis Alfonso Gámez publicó en un blog de El Correo Digital dos artículos titulados “Vendedores de misterios- Juan José Benítez” y “Dossier Planeta Encantado”.

En sendos artículos se calificaba a J. J. Benítez de “estafador, que no dice más que sandeces, iluminado, que basa su negocio en la mentira, el engaño público y la tergiversación”. También añadía refiriéndose al programa que dirige J. J. Benítez que “Es una lástima que TVE haya seguido el juego a este inventor de misterios. Programas como éste [estrenado en 2003] demuestran lo fácil que es que cualquier iluminado o estafador engañe a la población".

Estas calificaciones le valieron al colaborador de El Correo Digital una denuncia por vulnerar el honor de J. J. Benítez por la que se acaba de dictar sentencia condenatoria. L. A. Gámez debe indemnizarle con el pago de 6.000 € en concepto de daños morales.

El juez ha declarado que son expresiones insultantes innecesarias y sin justificación. Exceden "el derecho a la sana crítica" y son "atentatorias para la honorabilidad incluso de un personaje con relevancia pública como el señor Benítez”. Considera que comentarios de este tipo son un ataque al honor de Benítez porque "se extralimitan de lo que es el derecho a la información o la libertad de expresión al tener un sentido injurioso y vejatorio".

Cierto es que el sector esotérico es propenso a la aparición de ciertos personajes no muy fiables, pero acusar a un profesional y escritor reconocido desde hace años como J. J. Benítez de estafador es algo de locos. Puedes estar de acuerdo o no con sus teorías y líneas de investigación pero no hace falta llegar al insulto gratuito.